“Las continuas variaciones de la producción para contar con los stocks justos y necesarios para responder a los ciclos de la demanda, tanto al alza (como en los pasados meses) como a la baja (en esta ocasión), hacen necesario recurrir a mecanismos para garantizar una respuesta adecuada”, subrayó la empresa.
De esta forma, se llevará a cabo una suspensión de contratos de trabajo durante los días de cierre de la instalación, que serán 30 días entre el 15 de septiembre de 2015 y el 31 de diciembre del próximo año. El centro cuenta con una plantilla de 2.100 trabajadores.
Desde la compañía explicaron que la factoría de Madrid, al igual que el conjunto del grupo PSA, continúa su proceso de mejora continua y de refuerzo de la competitividad, por lo que está inmersa en un proceso de transformación que recoge actualizaciones en sus instalaciones.
Este plan también incluye el traslado de personas de otras entidades de la compañía en la Comunidad de Madrid al centro de Villaverde. Estas medidas se recogen en la iniciativa Optimad, que busca optimizar las instalaciones de la fábrica madrileña, con el fin de beneficiar el reciente lanzamiento del Citroën C4 Cactus y de mejorar el posicionamiento de la factoría para futuras adjudicaciones.