El concejal-presidente de Villaverde, Guillermo Zapata, ha reivindicado "la dignidad" del distrito y ha apostado por llevar allí una Ciudad del Sonido, "unas instalaciones que permitieran ensayar, grabar música y a la vez que fuera un referente para hacer conciertos".
"Me encantaría que este espacio fuera una referencia pero no solo en el distrito, sino para toda la ciudad. La cultura, igual que otras muchas cosas, no se puede quedar en el centro, tiene que llegar a todos los distritos de Madrid", ha declarado en una entrevista en el Diario del Ayuntamiento de Madrid.
Zapata cree que Villaverde es "un distrito muy abandonado institucionalmente". Es por eso que reivindica "la dignidad de Villaverde como distrito. Que sea visto como un sitio libre, seguro, multicultural, con una buena convivencia vecinal. Villaverde es un espacio que puede ser de mucha exclusión o de muy buena convivencia, y eso depende mucho del tipo de políticas que se pongan en marcha", ha argumentado.
En estos meses que lleva al frente de esta Junta Municipal ya han "remunicipalizado el polideportivo El Espinillo II", un centro de gestión indirecta, cuyo contrato de adjudicación acababa este verano. Él y su equipo han abordado también reivindicaciones antiguas como la regeneración de la Colonia Experimental. Entre las iniciativas que ha destacado están las primeras jornadas de cultura hip hop en el barrio de San Cristóbal o la creación de una Comisión de Navidad para organizar la cabalgata de Reyes con participación vecinal.
En cuanto a la prostitución en la Colonia Marconi, Zapata ha destacado que es "un problema de convivencia y de salud pública". "No se trata ya de que la Junta tenga competencias o no en este asunto, sino que tiene capacidad para mirar a otro lado o para abordarlo. Desde luego en mi voluntad está abordarlo, sólo que es un problema muy complejo y prefiero ser prudente", ha expuesto.
El edil ha adelantado que están trabajando "en algo de bastante envergadura". De momento han elaborado un diagnóstico de cuántas prostitutas hay en el polígono, cuántas ejercen libremente y no son víctimas de trata y cuáles son las reivindicaciones vecinales y de los empresarios. Ahora diseñarán una propuesta de intervención.
Guillermo Zapata ha reconocido, por otro lado, que faltan locales físicos para el movimiento asociativo pero cree que también es muy importante que se le dé una vuelta al uso de los centros culturales. "Son espacios que han desplazado a la gente joven porque no les ofrecen nada y necesitamos repensarlo de forma conjunta con el área de Cultura para que efectivamente sean lugares donde puedan estar, que sea un espacio para ellos, de reunión, o para escuchar música, hacer talleres", ha planteado.